Debo dejar
dos precisiones sobre el artículo anterior; y es que: el apaciguamiento de los
espíritus antisociales no es con la autosuficiencia humana, y a renglón seguido
aclaro que cuando dije que el mensaje no es mío, porque nada espero de mis
fuerzas ni de mi poder de convencimiento.
Tampoco es
armar partidos políticos para enfrentarse a otros; es tan sencillo y tan
complejo en la práctica que es de lograr crear motivos ideales de consensos
gerenciales entre quienes ahora gobiernan al país.
Para que en
un futuro cercano hallen las soluciones institucionales estatales sólidas e integrales
que logren abrirles oportunidades sociales formales y justas que vayan minimizando
la demanda fatal a la ilegalidad rampante de nuestra triste historia patria. A
esto. Con mis opiniones de fe. Quiero hacer parte.
También es
triste ver en el palmarés de la intelectualidad de quienes se postulan a ocupar
cargos vía elección popular y que en medio de sus campañas y alianzas superan
las mayores expectativas ciudadanas que le dan cierta popularidad en las
encuestas, suficientes para que sean elegidos.
Pero luego
tristemente ya gobernando, pareciera, así lo ven luego las mayorías
encuestadas, que su altísima capacidad intelectual se desvaneciese por completo
en la praxis gerencial de lo público. Recorto apartes de la más reciente
encuesta nacional que muestran unos resultados que se repiten:
Los temas
que más preocupan a los colombianos son la corrupción, la economía y la
inseguridad. Así mismo, los encuestados sienten que el acceso a los servicios
de salud ha empeorado, al igual que políticas como la atención a la vejez y a
la niñez, la atención al campo y la lucha contra la pobreza.
Y sigo
tomando de entre mis redes sociales datos de fuentes creíbles acerca de nuestra
situación social y su estancamiento sobre el desarrollo macro económico para
salir de la pobreza.
Y para dejar
en claro que no hago parte de ningún sesgo ideológico y político alguno, porque
de quien tomo estos datos, es precisamente uno de los más acérrimos detractores
de Fajardo. Y es Fajardo con quien más me identifico a la hora de encontrar aceptables
resultados en gobernabilidad pública. Esto consultó:
Senador: Aterrador.
Por qué en Colombia se necesitan once generaciones para salir de la pobreza y
en Chile seis - BBC News Mundo. Así tuiteo.
Yo a veces
siento que mi fe es demasiada intrépida, que es la misma que vengo compartiendo
en comunidad; no obstante que no vivimos en un país donde la calidad de vida es
envidiable; luego entonces, considero que mi fe es adecuada de acuerdo al mismo
ranking que miden a Noruega, siendo el mejor y, el nuestro, entre los vergonzosos.
Por eso. A quien logra leer mis
artículos, les recomiendo -con mucho respeto y actitud patriótica- seleccionar con
rigor de criterio constructivo y pacífico, a que limiten entre sus redes
sociales los mensajes políticos provenientes de ideales que ya no generan
esperanzas de avances sociales. ¡Pero! También. Tarea no apta para humanos.
Isaías 49: 25. Pero así dice el
Señor: Sí, al guerrero se le arrebatará el cautivo, y del tirano se rescatará
el botín; contenderé con los que contiendan contigo, y yo mismo salvaré a tus
hijos.