El papa Francisco afirmó que el
desempleo es la consecuencia de un sistema económico que ya no está capacitado
para crear trabajo, porque ha puesto en el centro a un ídolo que se llama
dinero.
En un discurso dirigido a
trabajadores de unas empresas, el pontífice señaló que el trabajo es un bien de
todos y tiene que estar disponible para todos.
Francisco llamó a los sectores
políticos, económicos y sociales a favorecer una economía basada en la justicia
y la solidaridad que garantice la posibilidad de desarrollar un trabajo digno.
El papa destacó que cuando habla con desempleados lamentan no poder llevar el
pan a casa, añadiendo que si falta el trabajo la dignidad del hombre resulta
herida. Prensa.
No entro en controversia con los
métodos estadísticos con que los gobernantes se miden en su misma gestión, la
cual son indicadores ya establecidos, un ejemplo, las estadísticas surtidas por
el Dane en Colombia; porque cuando los resultados son a la baja del gobernante,
la contraparte contraataca su oposición con los resultados obtenidos; pero
cuando son a favor del gobernante, se surte a la controversia.
Celebro que el gobierno Santos
obtenga resultados en la creación de empleos y la reducción de los índices de
pobreza e indigencia en Latinoamérica; y de que falta mucho por hacer, es
incontroversial desde cualquier perspectiva política alguna.
Pero me sitúo en la Costa Caribe,
la Región que más desigualdades sociales provee a niveles departamentales en
toda la Nación; solicito de paso a visitar uno de sus municipios más avanzados
entre los deplorables, Sabanalarga Atlántico; en donde, a simple vista, la
única fuente de trabajo para nuestros jóvenes y adultos parece ser el
denigrante e informal trabajo del mototaxismo.
Digo denigrante por dos justas
razones: el tener que soportar el ardiente clima de la Costa, y de paso, por
ser un mecanismo de movilidad incontrolable ante el hostigamiento sicarial que
los trae azotados y que viene asesinando a nuestros coterráneos.
Paradoja histórica. Dícese de
este municipio Caribe, que hubo una vez, una mujer parió un hijo al cual
bautizaron con el nombre de Evaristo Sourdis, un ilustre intelectual político
Conservador, quien representó a la Región con altura y decoro; pero su gesta
por la defensa de la regionalización, fue truncada por el rancio centralismo de
aquel entonces y sorprendido por la muerte por allá por los años 70.
En su historia reciente hubo un
segundo parto; bautizado como: Carlos Rodado Noriega, otro intelectual y
pragmático político de la misma estirpe Conservadora, que siendo gobernador del
Departamento del Atlántico y simultáneamente presidente de los Departamentos
para ese entonces; batalló ante el gobierno central por la consecución de
mayores recursos descentralizados para estas regiones con los mayores índices de
pobreza e indigencia.
Por fe en la justicia, esta
tierra gime, por la narración de un tercer parto, políticamente hablando.
Pero estoy narrando la historia
de dos grandes hombres costeños militantes de uno de los partidos más
tradicionales y al mismo tiempo cuestionable en la historia del bipartidismo
centralista en Colombia.
Pero así como dicen los
contradictores de nuestra Iglesia Católica; que por su tradición e idolatría
que algunos nos endilgan; no ha de salir un ser de luz. Pero hoy el Pontífice Francisco;
como un As bajo la manga, está poniendo a pensar al mundo Católico. ¡Y al que
no lo es!
_ ¡Pongan atención a mis
palabras! Diré con moderación lo que pienso, expondré con modestia lo que sé.
Cuando Dios al principio creó sus obras. Les señaló para siempre un orden en sus funciones, y estableció sus
jerarquías por todos los tiempos_ Eclesiástico, Cap. 16
Saludo, Julio.