Entro a terciar en la polémica por el premio que le otorgaron al
expresidente Uribe como el Gran Colombiano. A propósito. Habían dos discípulos
murmurando sobre quien podría ser el primero en el Reino de los Cielos. El
Maestro les contestó, el que quiera ser el primero, que se haga al servicio de
los demás.
A la controversia le encuentro dos orígenes. Si es por su gestión de
gobierno en donde le reconocemos algunos
méritos, que en cuanto a la Seguridad Democrática, hasta el mismo Presidente
Santos, reconoce de que si las Farc están dialogando en la Habana, es por los
resultados de Seguridad Militar obtenidos en el gobierno del expresidente. En
donde se pretendió que los Insurgentes quedasen arrodillados ante el poder de
la Fuerza Pública.
Pero si es por lo que hoy representa el exmandatario como Ciudadano
Ilustre, que indiscutiblemente hoy es más controvertido sin el poder que cuando
lo tenía. Para medir razones. Habría que congelar la distinción, y dejarle a
las Farc que lo refrenden al final de los diálogos con el actual gobierno.
Que de acuerdo a como salga y sea socializado ante la ciudadanía, según
resulte, esta distinción se valide aún mas, o lo contrario, pierda valor. Las Farc
deben determinar con madurez a la verdad y a la reparación de todas las víctimas,
o si seguimos condenados como pueblo, a
que guerra contra guerra, surte a mas
guerra. O por consiguiente, la civilidad
ya los visitó en su mente bélica.
Voy a mostrar las dos caras de la divida opinión ciudadana del
controvertido premio. Prensa: Más de 3.000 opiniones a favor y en contra llegaron
al foro de Eltiempo.com y La W:
Por ejemplo, un lector afirmó
que: Me parece excelente la elección del expresidente Uribe como el, Gran
Colombiano, es una manera de agradecerle la buena gestión que hizo como
presidente. Hasta ahora ha sido el mejor presidente en la historia que hemos
tenido; no se deja acobardar por nada ni por nadie, ama a Colombia con toda
pasión.
Otro usuario manifestó: Pienso
que si bien se trata solo de un programa de TV, mal que bien es la imagen del
país ante el mundo. El, Gran Colombiano, debería ser alguien cuyo nombre
provocara solamente orgullo. En este país del Sagrado Corazón hay miles y miles
de ejemplos, solo que hay algunos que gozan de popularidad.
Siempre he sido respetuoso de los
merecimientos, los reconocimientos y todos los premios individuales dados a
nuestros conciudadanos, sean de la cultura, la música, la ciencia, el deporte y
la literatura. ¡Pero cuantos! son determinantes para contribuir a la libertad
plena de nuestros pueblos y ciudades.
¡Más levántate pueblo! Porque si
ya en la humanidad se han superados: Inquisiciones. Esclavitud física. Y mandatos
de régimen dictadores. Pero aun, nuestros pueblos están ávidos de un pleno desarrollo
y la recuperación de su dignidad. De la democracia debe emanar lo
incontrovertido. ¡Por demás! Estaríamos condenados a la vanidad de algunos líderes actuales.
_Hijo mío, si das acogida a mis
palabras, y guardas en tu memoria mis mandatos, prestando tu oído a la sabiduría, inclinando
tu corazón a la prudencia; si la buscas como la plata y como un tesoro la
rebuscas, entonces entenderás el temor
del Señor y la ciencia de Dios encontrarás.
Reserva el éxito para los rectos.
Vigila las sendas de la equidad y guarda el camino de sus amigos. Entonces
entenderás la justicia, la equidad y la rectitud. Cuando entre la sabiduría en
tu corazón y la ciencia sea dulce para tu alma, velará sobre ti la reflexión y
la prudencia te guardará_. Proverbios 2.
Saludo, Julio.
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