lunes, 31 de agosto de 2020

CONSEJOS PARA UN FUTURO.

 

Lo que más me gusta de este GOB es que la tiene clara. Ahora quiere procurador de bolsillo. No le basta con fiscal y contralor. Les comparto mensaje en twitter de este otrora periodista detractor en la era del gobierno de Santos; @HassanNassar, ahora jefe consejero de las comunicaciones de la Presidencia del actual gobierno Duque.

Hay un dicho que dice: Que todo pez muere por la boca. Y para este caso, por su historial de mensajes en sus redes sociales, de cuando se es opositor, y luego, de alguna manera llegas a un cargo público en los gobiernos siguientes. Periodista de ser controvertido ahora como funcionario del gobierno, diría, entre otras palabras, que la democracia y la meritocracia ahora se hizo carne y, habita entre nosotros.

Y he aquí una píldora memorial para el cristianismo ciudadano, de un supremo consejo ante estos “consejeros” y demás tuiteros influyentes de las redes sociales colombianas, ver en: Mateo 23:3 Hagan lo que ellos dicen, más no lo que ellos hacen.

Contrario si algo tiene una persona prudente es salvaguardar su prestigio moral, sabiendo medir la crítica de un mal hecho político en contra de la ética, ya sea desde la opinión pública, periodística, o ciudadana, y desde cualquier sector social, más aún, si está en una oposición política pero con intenciones de gobernar o hacer parte a futuro de un gobierno.

Porque lo que se haga en lo presente, se lo cobrarán en su doble moral, o contrario, lo recompensarán y lo catapultarán para un bienestar en su futuro, sobre todo en asertividad. Pero es la asertividad, una ausencia absoluta de muchos políticos y periodistas.

Y con respecto a la actual situación del gobierno Duque, ahora, igual o en mejores condiciones que su gobierno antecesor. Duque que cuenta con la cercanía ideológica y partidista del ente judicial, en manos de la Fiscalía, y del Ministerio Público, como son el Procurador, Contralor y la Defensoría del Pueblo.

Y voy a referirme precisamente a esta reciente elección del nuevo Procurador General de la República; de la ya elegida magistrada barranquillera, Margarita Cabello, quien precisamente comenzó su carrera profesional en la rama judicial siendo juez penal de mi tierra natal, Sabanalarga, Atlántico.

Pero no voy hacer juicios de valores a priori sobre la cautiva libertad e independencia política de la ya elegida Procuradora, como tampoco vincularme al comité de aplausos teniendo en cuenta todo su palmarés intelectual judicial y la experiencia en el sector público, menos aún, porque sea oriunda de nuestra Región Caribe. Región de la cual brotan más sinsabores de vicios y desprestigio, que aciertos, entre quienes, de alguna manera, representan políticamente al Caribe colombiano.

Y como todo servidor público ordinario que llega a concursar mediante recomendación política, todos ellos en su discurso de elección o de nombramiento, es retórico el oírlos decir que serán independientes, conciliadores entre todos los sectores a gobernar y, además, si son del control público, que regirán sus actividades bajo las armas mortales para una administración eficaz, imparcial y transparente, sellando en su discurso de que ejecutarán sus mandatos “caiga quien caiga”.

Contrariamente y generalizando, ya sabemos la penosa historia judicial, legislativa, ejecutiva y administrativa del país; porque de perder un diente por cada incumplimiento hecho público, tendríamos, literalmente, una dirigencia mueca, enfrentando a una sociedad violenta, vengativa e impune. ¡La nuestra!

2 Corintios 10:4-5. Porque las armas de nuestra contienda no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas; destruyendo consejos y todo razonamiento altivo que se levanta contra el conocimiento de Dios, y poniendo todo pensamiento en cautiverio a la obediencia del Cristo.

 

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