viernes, 16 de agosto de 2013

CON LENGUAJE DE PAZ



El que gobierne un gran pueblo, que ha venido matizado por la guerra año tras año y que gobierno alguno facilite a la vez espacios para dialogar en medio del conflicto armado -caso actual colombiano- ,como es de conocimiento público,   dicho gobernante expone su capital de credibilidad a la deriva como en un limbo político electoral.
Y que su lenguaje de paz además estará expuesto por la impopularidad ante la ciudadanía por lo que  genera la cruda realidad del conflicto, por sus antecedentes infructuosos para un fin del conflicto que lo hacen parecer irremediablemente interminable.
Este ejercicio en la Habana del gobierno Santos y las Farc, que algunos dudan si es un diálogo o una  negociación, es como apostar en plena desventaja ante una insurgencia como contrincante que es un histórico monstruo que aparenta nada perder si no hay consensos de paz. Es como sembrar audazmente conociendo de antemano el terreno estéril, y en donde sus contradictores políticos alegan impunidad por ende su fracaso. ¡Dividiendo la opinión pública!
División de la opinión que se justifica cada vez que se mira en el retrovisor nefasto de anteriores diálogos, entre el hecho y el lenguaje bélico característico que alimentan esta guerra fratricida.
Reunidos el presidente Santos y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, ese país aseguró que respalda plenamente los diálogos con las Farc y que no descarta brindar el apoyo que sea necesario para que la solución política al conflicto armado sea una realidad.
Estamos del lado de los colombianos en este esfuerzo por lograr la paz, por lo que Estados Unidos no va a abandonar este proceso de paz y no va a parar su respaldo, precisó Kerry, agregando que Colombia está en el momento de pensar en un proyecto de estabilidad a largo plazo.
En foro sobre la paz, Iván Cepeda dijo que los actores deben someterse a justicia internacional. Es una contradicción que la sociedad colombiana quiera la paz, pero no acepta que las Farc, una vez dejen las armas, participen en política, que es la consecuencia natural de la desmovilización de un grupo armado. Si quieren legislar, tendrán que buscar la mayoría en las urnas, cosa que considero difícil.
Es urgente la negociación. El conflicto el año pasado dejó 256 mil desplazados y 700 amputados. Hoy hay que responder al Estatuto de Roma, a la Corte Penal Internacional y a las víctimas, agregó Navarro Wolf.
El expresidente del Polo Democrático, Carlos Gaviria, indicó que con la nueva conformación de la cúpula militar, el presidente, Santos, le estaría jugando a la paz y al postconflicto.
Con Lenguaje De Paz: Son los diversos puntos de vista de personajes del ámbito político nacional y extranjero. Prensa.
La letra de la ley en nada garantiza un pacto si en su Resolución institucionalizada dentro del Estado no existe la Reglamentación para una justicia social perpetua.
Caso hipotético que existiera. Es su letra muerta  el resultado de los hechos y del lenguaje de este descomunal conflicto que parece eterno.
Benigno e histórico que con este Acuerdo se cambien todas las formas de lucha, cambiando las tesis políticas de las Farc manifiestas en las balas, por la consecución ya en postconflicto por votos en las contiendas democráticas.  ¡Luego! ¿Sobre qué Acuerdo disolverán los demonios de mil cabezas de los carruseles de corrupción pública que matan letalmente las oportunidades de los más necesitados?
_El que gobierne a los hombres con justicia, el que gobierne en el temor de Dios, será como la luz de la aurora. Pues él hizo conmigo un pacto eterno, totalmente reglamentado y seguro_ Segunda de Samuel, Cap. 23.
Saludo, Julio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario