martes, 13 de noviembre de 2018

NO SERÉ CANDIDATO


Para mi corto nicho de lectores va este titular; y es para confirmarles que NO tengo aspiraciones a cargos públicos vía elecciones populares ni en el corto ni a largo plazo.

En la obviedad del lector y su juicio y conclusiones de mis reiteradas críticas de opinión a las malas prácticas de cualquier gobierno de turno en su delito contra la administración pública permanente.

Cuestionar y, a la vez tratar de presentar, desde el sector privado, queriendo modestamente mostrar a manera de fe soluciones a las incontables necesidades básicas de los sectores más populares de nuestra insensible desigualdad social en cada una de las regiones.

Desisto en mi imaginación de que en algunos de mis “fans” de lectores alguien se halla hecho la idea de alguna candidatura de elección popular mía hacia algún cargo público; y este titular lo “decepcione”. Y siendo más atrevida mi imaginación, que alguien se sienta tranquilo, algún candidato aspirante desde mi Región Costeña “complacido” con esta confirmación para NO aspirar a cargos públicos en esta desventajosa y fraudulenta democracia.

¿Pero para qué ser candidato? Si ya hay mucha gente valiosa entre todos los partidos políticos en el país; unos más que otros, que primeramente no se desesperan por llegar a un cargo público con el solo hecho del Todo Vale y a cuestas del "favor" de los "patrióticos" Barones electorales.

Los más pacientes esperan un verdadero Compromiso Ciudadano de parte del electorado en general para que en cada región se les escuche con libertad y sin constreñimiento al ciudadano, y sin dádivas, sino que sean tenidas en cuenta sus propuestas de campaña y que sean valoradas no por el partido o el líder político que los representan.   

Y esa labor de convocatoria ciudadana de fe por la justicia y la solidaridad al más necesitado, suele ser más imprescindible y fundamental que una aspiración personalizada. Por estos medios llevo casi dos décadas en esto.

Y en verdad hay mucha gente valiosa con ganas de servir en el arte de la política, pero sus miedos y temores ante una realidad amenazante y criminalizada se los impiden.

Y es que ocupamos los primeros lugares en el ranking mundial de los más "felices" y nada hemos podido cambiar nuestra imagen generalizada en el exterior de violentos y de ser una narco-sociedad; porque seguimos siendo enemigos y engañadores entre nosotros mismos.

Pero seamos realistas que cambiar la cultura de la amenaza y la muerte al "enemigo" político para ser o verse como el más grande; nos va a costar un "ojo de la cara" de tolerancia y sagrado sacrificio ciudadano. 

Porque es tan fácil engañar al otro en campañas políticas. Todos lo sabemos. Pero hay regiones donde el engaño político electoral poco prospera. !Entonces¡ Hay que copiar y pegar. Tarea titánica de acuerdo a la región donde viva y aspire el candidato. 

Papa Francisco: Rezar significa llamar a la puerta de un amigo. Dios es nuestro amigo.

miércoles, 7 de noviembre de 2018

SÍ TENEMOS ARREGLO

Desde la óptica de un simplista opinador la solución de arreglo a nuestro país, la primera opción de seguro es la pena de muerte para delitos de lesa humanidad.

Y propondría el ciudadano simplista aplicar una especie del "jueguito" de la ruleta rusa, como sustracción de materia, para ir eliminándose entre ellos mismos: a la criminalidad y el delito a la administración pública.

Y es que nosotros demostramos un masoquismo y una sociedad conformista cada vez que aparecemos en los primeros puestos de las encuestas como Nación en el ranking de los países más felices del Mundo. 

Siendo éste un "feliz paraíso terrenal" pero con los mayores índices de desigualdad social.

Pero hay estudios científicos que dicen que la felicidad de la gente no tiene nada que ver con el estado social y económico de las personas; sino que se es feliz desde adentro con lo poco o nada material que se tenga.

Podríamos concluir que somos una raza humana especial y sumamente agradecida con la naturaleza con el solo hecho de gozar de salud y con apariencia de estar vivo.

Pero habría que corroborar teniendo en cuenta la actual situación tenebrosa para la clase popular en materia fiscal por más impuestos, y que nos encuesten ahora para saber si esto tampoco afectaría nuestra "felicidad popular o unos dichosos y felices hermanitos de la caridad y solidarios con los ostentosos gastos familiares de los más pudientes".

Y para quienes, de alguna manera, lo pensamos, a quienes ya lo trabajan o tenemos la fe de hacerlo por hallar la igualdad de oportunidades para todos; por lo menos ya tenemos un terreno emocional abonado siendo nosotros felices y orgullosamente colombianos inclusive dentro de un terreno social miserable y en regiones más indignantes y deprimentes que otras.

La tarea de fe conjunta de cambiar la existencia popular del hambre de nuestra gente es ir buscando otra fórmula de arreglar la Nación. 

Y que no sea simplemente a través de ésta "democracia" permeable al clientelismo y la corrupción y al populismo dada la inconciencia y la habilidad del candidato para engañar a sus electores. Candidatos donde han podido escudriñar la fragilidad de discernimiento del electorado mayoritario. Y ciudadanos que no escudriñan el origen y trayectoria de su partido, de su experiencia en cargos públicos y, en general, de su hoja de vida como administrador.

Porque ya elegidos los malos gobernantes; y de eso nos sobran testimonios, nos viene a la clase menos favorecida ante un Estado Social de Derecho, el llorar sobre la leche derramada en un lamento popular y el crujir de dientes desde el intestino del hambre de los más pobres.

Papa Francisco: La fe es vida: es vivir el amor de Dios que ha cambiado nuestra existencia. La fe es una cuestión de encuentro, no de teoría. 

sábado, 3 de noviembre de 2018

UN TEMOR ANTES DE...


Ni en mármol o escribiéndolas en letras de oro, millones de ciudadanos nos indigestan las promesas electorales populistas.

Pero ya elegidos por mayorías, estos gobernantes nos convencen a grosso modo, que este país no tiene arreglo. Sobre todo, arreglo para los más pobres.

Y quienes hablan sin demagogia, sino con sinceridad y con un alto grado de conocimiento administrativo público probado, esos pocos que no prometen el cielo y la tierra, a estos candidatos, el resto de los ciudadanos, que son las mayorías, los ignoran y los ven inconvenientes comparándolos con los discursos tradicionales del gremio del populismo.

En campaña el actual mandatario manifestó enfáticamente reparos por ir en contravía de la clase popular la presentación y luego la aprobación de la represiva Reforma Fiscal del anterior gobierno, ahora su "Ley de Financiamiento Fiscal" es decir: el IVA de Iván, del cual pretende gravar la canasta familiar con más impuestos.

Pero las carencias básicas que siempre no se van a resolver pidiendo un diluvio, o separar las aguas de los mares, ni mucho menos que la tierra se abra para que se trague a los que sabemos.

Ni así históricamente, se han resuelto de una vez por todas los grandes problemas de una sociedad, porque habría que borrar de la Real Academia (RAE) la palabra perseverancia, y en la Biblia la palabra paciencia, que es simiente en la evangelización. 

Y otra palabra a eliminar previa a los comicios democráticos para elegir a nuestros gobernantes sería la sabiduría.

!Empero¡ Si la defensa contra la opresión y el logro del desarrollo socio-económico de los pueblos en democracia fuese mediante la sabiduría de su fe.

Entonces el perfil de sus candidatos, los más opcionados fuesen hombres y mujeres primeramente probados en la calidad de su fe y, no necesariamente intelectuales y hábiles para juntar y ganar elecciones con multitud de votos.

! Ahora¡ So pretexto de defender una "amenazante" avanzada ideología de género, preocupa el silencio tácito de no luchar contra la corrupción en líderes religiosos influyentes en sus cultos y en la política, donde hay un notable permisivo favor a la continuidad del clientelismo desde lo electoral. ¿Los tibios en la fe a favor del nepotismo o a un diezmo gobiernista permanente?

Papa Francisco: El futuro lo tienes que hacer tú con tus manos, con tu corazón, con tu amor, con tus pasiones, con tus sueños. Con los demás.