¡Ganó La Corrupción…! Cartagena y
Bolívar están en manos de una clase política indolente y cínica que tiene, por
desgracia, respaldo electoral. ¿Cómo enfrentarla? @leydelmontes
Hay mucho material importante en
esta investigación periodista de, Oscar Montes. Voy a resaltar lo más relevante
de este dossier criminal y abominable contra la democracia colombiana en su
elección popular a cargos públicos:
Se volvió lugar común hablar del
mal momento que atraviesa Cartagena, la ciudad más querida por los colombianos.
No pasa un día sin que la capital de Bolívar sea mencionada en un escándalo de
corrupción, que involucra a su clase dirigente y también a un buen número de
contratistas, que encontraron en la administración de los recursos públicos la
mejor fuente de enriquecimiento ilícito.
La Fiscalía General investiga la
posible participación del gobernador de Bolívar, Dumek Turbay. Pese a la crisis
administrativa, política y financiera, la Alcaldía de Cartagena es una de las
más apetecidas del país, lo que les permite una enorme exposición mediática,
así como una gran disposición de recursos frescos por cuenta del respaldo que
brinda el Gobierno Nacional.
Hace algún tiempo, Juan Gossaín
-el hijo adoptivo más ilustre de Cartagena- se refirió a la crisis de la
ciudad. Lo hizo de forma cruda y certera.
En Cartagena -dijo Gossaín- no
podemos hablar de buenas elecciones, cuando un domingo típico de elecciones,
las clases más pudientes de la ciudad, las clases dirigentes, se levantan bien
temprano pero no para ir a votar, sino para irse a las Islas del Rosario. Y los
más pobres, se levantan a esa misma hora, pero tampoco para ir a votar, sino
para vender su voto.
En los últimos 7 años Cartagena
ha tenido 15 alcaldes. De acuerdo con la Fiscalía, el saqueo comprometería las
arcas de los acueductos del Carmen de Bolívar, El Peñón, San Juan Nepomuceno y
San Jacinto. Hasta aquí, hago el corte periodístico de, Montes.
¿Y cómo enfrentarla? es la
pregunta de Oscar. Y yo encontré en el Evangelio de Lucas 4; esto: Jesús es tentado por el diablo. Cuando el
diablo había intentado todo, lo dejó hasta una próxima oportunidad.
Esa “próxima oportunidad” que postergó
el evangelista, la supongo en un transformado “demonio electoral” que egocéntricamente
tienta, convence y contrata para esta empresa criminal electoral, a nada más y
nada menos, que a los políticos raizales de la corrupción en Cartagena. No le
busquemos otra manera tan poderosa, infame e impune, de que roben y sigan en el
poder.
Pero para la solución contra la
criminalidad electoral, no existe otra vía posible que no sea por la democracia
participativa; y es seguir educando y concientizando al votante, de que, la
vida digna de nuestros pueblos -incluido ellos- reposa es en el poder del voto consciente
y libre.
Y culpamos públicamente a los
ciudadanos de a pie, a quienes los líderes políticos compradores de votos le
encuentran su precio, pero reciben su constreñido pago; más no ignoren el daño común
de cínicos indolentes fervientes de la “fe diezmal”.
Suntuosos líderes religiosos quienes
se confabulan con esas mismas empresas electoreras para llevar en masas a sus congregados
creyentes adoctrinados, a cambio de favores políticos, dádivas, pero para sus bolsillos
personales.
Hay un decir en política que
dice: Lo que es con “fulano” es conmigo. Aplíquenlo para Cartagena; porque lo
que hacen putrefactamente en estas elecciones regionales, lo homologan también en
presidenciales.
Zacarias 8:12 Afirma el Señor:
Habrá paz cuando se siembre, y las vides darán su fruto, la tierra producirá
sus cosechas y el cielo enviará su rocío. Todo esto se lo daré como herencia al
remanente de este pueblo.
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