Voy a seguir rayando sobre este
contexto de la Democracia, quien raya en nuestra Constitución Política. No sé
si algunos se escandalizaron cuando trate de decir que hemos de ser liberados y
libertados en nuestras propias conciencias; ejerciendo como verdaderos
ciudadanos, sin caudillismo alguno y, sin utilizar las armas como argumento
incivilizados para libertar pueblos y ciudades.
Lo que me sucedió a mi por allá
por esos años 99, cumplido ya 13 años en meses, era la invitación a ser mejor
cristiano del que solía ser, quizás más pecando que rezando para esa época, y
lo que hoy alcanzo a comprender es que en esa invitación estaba intrínseco el compromiso de
que también se requiere igual de interés social como ciudadano. Como quien
dice, si debes escudriñar las Escrituras, también, tu Constitución política colombiana.
A entender, a ser demócratas a carta cabal ante la sociedad.
Para esa época había -muy
convencidamente- mejores cristianos que este suscrito; igual hoy, deben haber
mejores ciudadanos para librar una cruzada de animación ciudadana pacifica ante
esta encarnecida guerra entre nosotros mismos. Creo que ahora no es escándalo si
lo vemos de ese modo. ¡Para quienes en verdad! se escandalizaron, viendo en mí
manifestar. Un nuevo Libertador.
Podría de esta manera inventarme
algo en mi dualismo filosófico; ya que la Escritura manifiesta que hay fiesta
en el cielo por cada cristiano convertido y comprometido. Podría sentirse
alegre nuestra Constitución Política cuando un nuevo ciudadano la manosea para
hallar en ella conocimiento y compromiso con la causa demócrata. ¡Podría ser! En
mi verdaderas ganas de ayudar a libertar nuestras conciencias.
Pero en nada será fácil, viendo
ante mano estas desfasas leyes en las contiendas democráticas y su menos despreciable
costos financieros para el Estado: De los 31 millones 265 mil 418 colombianos
aptos para votar en las consultas internas que el Polo Democrático, el Partido
Verde y el movimiento Mira hicieron ayer –pasado- solo un poco más de 506 mil
lo hicieron –es decir, el 1,61%– con lo cual se evidencia el fracaso de esta
jornada electoral que le costó al Estado $70.000 millones.
Voy a traer a colación otra noticia –con mucho mas aliciente para esta rezagada Costa Caribe-que tiene intrínseco e inherente el compromiso de un ciudadano en la construcción de las Instituciones del Estado, sabiendo con conocimiento de causa de cómo están gobernando e invirtiendo los recursos económicos públicos.
Voy a traer a colación otra noticia –con mucho mas aliciente para esta rezagada Costa Caribe-que tiene intrínseco e inherente el compromiso de un ciudadano en la construcción de las Instituciones del Estado, sabiendo con conocimiento de causa de cómo están gobernando e invirtiendo los recursos económicos públicos.
Pudiendo así el saber premiar o
el castigar en la opinión y la elección de nuestros gobernantes de turno:
porque se dice que el Banco Interamericano de Desarrollo, quien le entregó en
un foro dado en la ciudad de Barranquilla, un
Plan de acción para que esta ciudad pueda convertirse en una prospera
Ciudad Sostenible.
_ Para que en Cristo Jesús la bendición
de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa
del Espíritu. Hermanos, hablo en términos humanos: Un pacto, aunque sea de
hombre, una vez ratificado, nadie lo invalida, ni le añade. Ahora bien, a Abraham fueron hechas las
promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de
muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo. Esto, pues,
digo: El pacto previamente ratificado por Dios para con Cristo, la ley que vino
cuatrocientos treinta años después, no lo abroga, para invalidar la
promesa. Porque si la herencia es por la
ley, ya no es por la promesa; pero Dios la concedió a Abraham mediante la
promesa_ En Gálatas.
Escándalo y regocijo para el ciudadano
colombiano, cuando en su propia conciencia baje la justicia social.
Saludo, Julio.
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