Y se quedó con el pan y con el queso. Y creo que así materialmente le fue al “huérfano pastor” cristiano a su anuncio y preparación de un rapto acá en la Costa Caribe.
Religioso huérfano espiritual
porque le faltó el consejo maternal de la piedad y la sabiduría, para asemejar
y poder convertir el agua en vino; Juan 2:4-5. Y lo que quedó de este acto
bullicioso, fue un rapto hacia los bienes materiales de sus incautos y adeptos
feligreses.
Y nada más de ser cierto del “signo”
anunciado, ya las grandes Agencias mundiales del turismo Internacional, al día
siguiente del "rapto milagroso" ya estuvieran recomendando a sus
turistas corporativos revertir las visitas a la *actual Tierra Santa* en la contemplación
de seguir vivificando la historia de la salvación y la resurrección.
En cambio la sugerencia sería
ahora visitar a un corregimiento llamado, Isabel López, municipio de
Sabanalarga, epicentro de la Costa Atlántica, en Colombia. Y la recomendación turística
para creyentes y curiosos estaría por encima de la desacreditable imagen de ser
una tierra violenta, de narcotraficantes, e inclusive, el ferviente deseo de la
curiosidad estaría por encima del actual riesgo de contagio de este
coronavirus.
Y. ¿Qué cuánto beneficio económico
y social hubiese sido? Tanto para las agencias en la venta masiva de tiquetes,
como para el transporte multimodal de pasajeros hacia esta Región; y al día de
hoy, como dice la canción: No habría cama para tanta gente. Y en materia de
empleo formal, los trabajadores serían insuficientes para tal magnitud turística
inesperada.
Y siguiendo en mi vivificante alucinación
espiritual, mensajes de reflexión, de fe y esperanza en las redes sociales
quedarían como anillo al dedo: @MonsRueda *¿No es este el carpintero?* Los
paisanos de Jesús, han visto su familia y su trabajo, ahora se asombran de su
sabiduría y enseñanza, les falta dar el paso de la fe, y acogerlo como el *Hijo
de Dios.*
Pero en verdad la semejanza es
una de las palabras y las acciones más ambiciosas en el contexto bíblico; porque
nos crearon a semejanza de Nuestro Creador; y también se dijo en un llamado: Sed
perfecto, como vuestro Padre lo es. Una más: Ya no vivo yo, Cristo vive en mí.
Tampoco no nos vayamos tan lejos
en el tiempo pasado de la historia, en el espectro político colombiano también
se ha ambicionado ser semejante al otro, recordemos ese funcionario y ministro
estrella que ya luego como candidato presidencial lo apodaban
"uribito" y de ahí, con esa semejanza, escalar más rápido el poder político.
También haciendo alarde de otro
decir popular de "ponerse en los zapatos del otro" entonces si yo
fuera tú, pensaría y dudaría lo mismo al leer mis escritos que son mis
pensamientos de fe.
Y lo haría porque no hay
semejanza corporal entre quienes me conocen y me tratan a diario, ya que también me diría una y otra vez, *este no es
fulano de tal*. Y ¡cómo es que escribe esto o aquello! ¿Acaso está, o se cree
estar en los “zapatos” de un redactor divino?
@MonsMercado: Jesús no es un
“mago”. Sus milagros no son “trucos” sino “signos” que manifiestan poder y
señorío. A través de Él, Dios hace nuevas todas las cosas. ¿Qué pides al Señor
para tu vida?
Y nuestra semejanza de solicitud colectiva
no puede ser otra que el “rapto” al endemoniado y criminal negocio del
narcotráfico en todas las instancias sociales y civiles en el país;
primeramente, contra quienes patrocinan y criminalizan la democracia.
Salmo 34:15 Los ojos del Señor
están sobre los justos, y sus oídos atentos a su clamor.
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