De Álvaro a Álvaro. Voy a tomar
apartes interesantes de esta columna de opinión de Mauricio Vargas. Prologo: Nada
aprende de su pasado un país que juzga a sus líderes sin matices, en blanco y
negro. Mauricio hace unas comparaciones entre los expresidentes, Álvaro Gómez y
Álvaro Uribe. Conclusiones que lo extrae de un libro: Su vida y su siglo, de
Juan Esteban Constaín, una provocadora biografía de Álvaro Gómez Hurtado.
Dice; por décadas, la figura de
Gómez dividió al país, aunque de manera desigual: los más le colgaron el inri
de gran promotor de la violencia entre liberales y conservadores que marcó el
siglo XX, los menos lo endiosaron como el defensor puro e incorruptible de la
doctrina conservadora.
Y de Uribe anota lo siguiente: En
cuanto a Uribe, el juicio de la historia apenas empieza: causó la derrota
militar de las Farc, y con ello le devolvió viabilidad al país e hizo posible
lo que vino luego, el proceso de paz de Santos. Pero se equivocó –y se sigue
equivocando– en su empeño de querer perpetuarse. Concluyo con lo de Mauricio.
Dirigentes que arreglaron entuertos
y crearon otros, y en esto estoy completamente de acuerdo con Vargas; también dije
en uno de mis artículos anteriores, que la vida cobra errores; ahora algunos simpatizantes
quieren revivir a unos y enterrar a otros.
Pero digo con respeto y fe de patria,
que ellos son el pasado; porque ambos, el uno muerto y sepultado y, el otro, políticamente
hablando, va en la misma tónica. Y ahora hay que construir un país donde
quepamos los que vamos quedando y bregando sin lucha de clases ni
endiosamientos.
Recuerden que en la segunda
vuelta presidencial quedaron las dos extremas ideologías políticas que siguen
polarizando; no olviden que en la división electoral estaban las dos vertientes
“salvadoras” para el país; del que ganó poco o nada se ha visto, porque veo,
leo y oigo la misma desesperanza de los jóvenes universitarios que no
encuentran la oferta laboral para ejercer sus logros profesionales siendo justamente
remunerados.
Y del que lidera la oposición,
para estas próximas elecciones regionales, pierde en su capacidad de
convocatoria y oratorio política, ahora en la propia capital del país su
partido político se ha resquebrado y dividido, y desnudada su vanidad de
caudillo. ¿Y si hoy no puede unir lo regional y lo local?
Y este es una propuesta industrial
propia para el perfil que gobierna: @elespectador Según indicó Sergio Clavijo,
presidente de Anif, a los jóvenes menores de 25 años se les pagaría el 75 % de
un salario mínimo por máximo un año. ¿Qué opina de esta propuesta?
Y muchos sabemos las
prerrogativas económicas de este gobierno para con los empresarios. Y del pensamiento
empresarial guardo este criterio, como empleado que soy; porque cuando hay
crisis empresarial, la socializan y piden solidarizarnos, hasta quitándonos
beneficios salariales y contra la sociedad desempleada, mermarles desde sus
inicios laborales.
Pero injustamente ellos y sus
familias siguen gastando y comiendo manjares. Y mermarle el pan y la leche en
el seno de los empleados y desempleados, solo desde su mezquina inteligencia,
es donde solo se les ocurre enfrentar las crisis económicas. Crisis nacional. Paradójicamente,
originadas por sus mismos gobiernos simpatizantes.
Pero mi fe reta al pesimismo y al
pragmatismo. Y veo propicio este mensaje tuitero; que representa a esta
sociedad colombiana marginada, que ve que su esperanza de país sigue siendo anémica.
Escribió: @padre_sam: Alimenta bien tu fe y tus dudas morirán de anemia.
Salmo 22:9 Porque tú me sacaste
del seno materno; me hiciste confiar desde los pechos de mi madre.